Viernes,
otro día comenzaba, apagaste el despertador, y te dispusiste comenzar con la
rutina de todos los días.
Ya
en el comedor, con tu papá enfrente y tu mamá al lado comenzaste a desayunar.
-como
estas hija? –te pregunto tu mamá, la miraste extraña, ya que su trato para
contigo estaba cambiando-
-si,
vos? –preguntaste dudosa-
-
igual –respondió la misma e hizo una pausa- se que con papá estamos muy fríos
contigo desde lo sucedido, pero entendemos mi amor, estamos dolidos –dijo sincera,
y hablar del tema te ponía mal, porque te sentías culpable, te odiabas en esos
momentos-
-perdón
–dijiste con un hilo de voz, no querías llorar, te tragaste todo y decidiste
calmarte-
-prometemos
–mirándolo a tu papá y este asintiendo- que todo va mejorar, si? Ahora que ya
paso un poco, nos dimos cuenta que no tenes la culpa, que sucedió y fue así, perdónanos
hija –dijo también con un hilo de voz, y tus lagrimas ya salieron, no pudiste
contra ellas-
-si
tuve la culpa, y tienen todo su derecho en odiarme –dijiste ya hecha un mar de lágrimas-
-no
hijita, papá y yo fuimos muy duros contigo, sin pensar en tu dolor también, no
Miguel? –Dijo tu madre un poco molesta porque tu papá seguía en silencio-
-sabes
que no me gusta hablar mucho de esto –dijo mirándote- no me gusta verte llorar –hizo
un pausa y siguió- lo pasado pisado, si? Ahora sos nuestra única hija, y
queremos cuidarte y estar contigo siempre –y volviste a llorar, esperabas este
momento desde el día de lo que sucedió y ya estabas convencida de que no iba a
llegar-
-gracias
y perdón, perdón enserio –dijiste sollozando-
-veni
mi amor –dijo tu mamá y fuiste junto a ella, se paro y te abrazo, hace casi un
año que no lo hacía y te aferraste fuerte a ella- te amo hija –beso tu frente-
-yo
también mami, mucho –la abrazaste-
-para
papá no hay un abrazo? –sonreíste y fuiste corriendo para abrazarlo, deseabas
que ese momento no termine jamás-
Te
encontrabas entrando al colegio, luego de ese emotivo momento con tus padres,
luego de haber hecho lo posible para que nadie note que lloraste, lograste ver
a tu amiga mas adelante y fuiste junto a ella.
-Pochita
–te abrazo-
-Cachorra
–sonreíste y ella te miro fijo a los ojos-
-llorabas?
–y como te conocía-
-Para
que te voy a decir no, si me conoces –reíste- si –terminaste-
-Otra
vez con lo de tus viejos? –pregunto un poco apenada-
-Algo
así, me abrazaron Zai –dijiste emocionada-
-Viste
gorda, yo te dije –dijo contenta y te abrazo- solo les tenías que dar tiempo.
-Igual,
no dejo de sentirme culpable –dijiste sincera-
-Sh,
no lo sos Paula, deja de darte con un látigo sola, entendelo –dijo un poco
enojada-
-Voy
a callar solo porque estoy contenta –reíste-
-Mejor
–y escucharon el timbre que indicaba que debía entrar al curso-
-Vamos
yendo cachorra.
-Dale,
vamos –dijo esta y fueron hasta el curso-
**
muy bueno,subí más...
ResponderEliminar¡Muy bueno! Subí más, Fati. Un beso enorme, @Piyueliitaspyp
ResponderEliminar